Una historia de raíces, preguntas y aprendizajes
¡Holi! Mi nombre es Desiré, y podría empezar diciendo muchas cosas sobre mi...
Nací en Bizkaia en 1988, soy Aries y licenciada en Física
Trabajé durante unos añitos en una multinacional
He emprendido varias veces. Soy vegana y muy curiosa
Viajé mucho tiempo de mochilera y he vivido en varios países
Ahora vivo con tres gatas que vinieron conmigo desde México
Amo el silencio, el mar, escribir a mano, los cuadernos nuevos y los bolis de colores
Me pierden los proyectos con alma, las ideas que nacen despacio y las conversaciones largas con café
Podría seguir porque me encanta aprender, cambiar, desaprender, volver a empezar… pero nada de eso cuenta realmente quién soy.
Porque somos más que etiquetas: somos mezcla de lugares, decisiones y pequeñas cosas que nos sostienen
Lo que me mueve no es tanto lo que hago, sino cómo y desde dónde lo hago.
Cuestionar la forma en que nos enseñaron a vivir, a producir, a “ser alguien”.
Buscar formas más lentas, más humanas y más honestas de crear.
Porque yo también he estado ahí: haciendo lo que “se supone” que debía hacer, intentando llegar a todas partes… y acabando agotada.
De esos procesos (y tropiezos) nacieron mis cuatro proyectos.
Todos siguen vivos de alguna manera, aunque ya no tengan la misma forma.
Cada uno me enseñó algo sobre lo que significa emprender sin perderte por el camino.
No creo en el emprendimiento perfecto, sino en el que nos permite vivir con sentido
De ahí nace Kimu Raíz
De esa necesidad de crear sin quemarme. De encontrar una forma de emprender que aporte a la sociedad que nos rodea. Más humana, más lenta y más consciente.
Kimu Raíz es mi forma de acompañar a quienes también quieren construir desde dentro, con raíces firmes y un ritmo propio.
Sin fórmulas, sin máscaras, sin prisa.
Con escucha, curiosidad y mucho respeto por los procesos.
El Curso Raíz se divide en cinco clases, que nos trasladan a la naturaleza (Tierra, Semilla, Brote, Fruto y Cosecha).
Nacen de lo que he vivido emprendiendo (y reemprendiendo) durante casi una década.
De las veces que me perdí, de las que volví a empezar, y de todo lo que he aprendido sobre hacerlo sin quemarme.
Es un acompañamiento que me hubiera gustado tener al principio: sin fórmulas mágicas, sin prisas, con espacio para pensar, sentir y crear desde dentro hacia fuera.
Un pequeño punto de partida para reconectar con lo que te trajo hasta aquí y sembrar tu proyecto desde la raíz. 🌿